La importancia del uso de espumas y selladores en SATE

Cuando hablamos de un sistema de aislamiento térmico por el exterior (SATE), solemos pensar primero en los paneles aislantes, los adhesivos o los morteros de revestimiento. Sin embargo, hay un detalle que a menudo pasa desapercibido y que resulta clave para garantizar la durabilidad y el rendimiento del sistema: el uso correcto de espumas y selladores.
Estos productos cumplen una misión fundamental: asegurar la continuidad del aislamiento y la estanqueidad del sistema. Allí donde los paneles no pueden encajar a la perfección —juntas, encuentros con carpinterías, dinteles, cajas de persiana—, las espumas expansivas y los selladores de calidad tipo MS permiten cerrar esos puntos sensibles y evitar puentes térmicos o filtraciones.
Además, protegen al sistema frente a dos de sus principales amenazas: la humedad y las infiltraciones de aire. Una pequeña fisura sin tratar puede convertirse en la puerta de entrada al agua, comprometiendo no solo el aislamiento, sino también la estabilidad del soporte y la eficiencia energética de la vivienda.
No se trata solo de rellenar huecos, sino de hacerlo con productos compatibles, flexibles y duraderos, capaces de absorber movimientos del edificio y mantener la hermeticidad en el tiempo. Por eso, elegir espumas y selladores específicos para SATE no es un gasto adicional, sino una inversión en garantía y confort.
Gama de espumas y selladores en GECOL
En GECOL contamos con espumas y selladores para todas estas patologías y para todo tipo de proyectos:
Alsan Foam EPS/XPS: Espuma de poliuretano adhesiva, monocomponente, que cura con la humedad. Adhesivo de baja expansión, recomendado para la unión de placa de aislamiento térmico, especialmente EPS, XPS y placas de PU.
Alsan Flex 2911 CO: Sellador y adhesivo monocomponente elástico que cura con humedad. Es un polímero híbrido de módulo medio.
Un sistema SATE bien ejecutado no se mide únicamente por la calidad de sus paneles o morteros, sino también por la atención a los detalles. Y en esos detalles, las espumas y selladores juegan un papel tan decisivo como discreto: sellar para proteger, aislar y garantizar eficiencia energética durante décadas.
